Si todavía sufres las consecuencias del tradicional empacho navideño y quieres aligerar peso no tienes más que echar un vistazo al comunicado que ha perpetrado CCOO acerca del relevo en la dirección territorial de Cataluña
No tiene desperdicio. Empiezan alabando la labor del anterior Director a pesar de la provisionalidad que ha caracterizado su gestión. Que impulsó, lo dice textualmente, un cambio cultural en la empresa (¿Qué diantre es un cambio cultural en una empresa? ¿De qué diantre hablan? ¿Qué rollo es ése?). Nos consta que era un trabajador infatigable, tanto que ni salía de su despacho, ni se le veía el pelo por parte alguna, hasta el punto de que muchos no sabemos ni qué cara tenía. Dicen, eso sí, que era un hacha resolviendo crucigramas.
CCOO amenaza a la plantilla con proseguir sus relaciones fluidas y cordiales en el ámbito de la negociación con el nuevo mandamás, es decir, para regalarnos, sin que se lo pidamos, acuerdos birriosos, convenios devaluados, concursos de traslados opacos e incomprensibles, retribuciones variables, despidos de PFV’s… un variado repertorio de sustos y sobresaltos. ¿Es ése el cambio cultural al que se refieren?
También CCOO insta al nuevo dire, así lo dicen y tal cual lo reproducimos, a la neutralidad política y la promoción de los mejores profesionales de una Zona, como la V… ¡¡¡NO EXENTA DE RÉMORAS CLIENTELARES!!! -los signos de admiración y las mayúsculas son nuestras-. Esta petición de CC.OO se comenta por sí sola. ¿No sabrán ellos de qué va eso de las rémoras clientelares?
Lo dicho, si aún padeces de empacho por los atracones de las Fiestas, no necesitas sal de frutas o bicarbonato para aliviar la tripita. Te miras el protocolario comunicado de CCOO en posición de firmes -a sus órdenes- ante la nueva Dirección, que sigue siendo la suya, y si no te dan arcadas y arrojas es porque tienes un estómago a prueba de bombas.
No tiene desperdicio. Empiezan alabando la labor del anterior Director a pesar de la provisionalidad que ha caracterizado su gestión. Que impulsó, lo dice textualmente, un cambio cultural en la empresa (¿Qué diantre es un cambio cultural en una empresa? ¿De qué diantre hablan? ¿Qué rollo es ése?). Nos consta que era un trabajador infatigable, tanto que ni salía de su despacho, ni se le veía el pelo por parte alguna, hasta el punto de que muchos no sabemos ni qué cara tenía. Dicen, eso sí, que era un hacha resolviendo crucigramas.
CCOO amenaza a la plantilla con proseguir sus relaciones fluidas y cordiales en el ámbito de la negociación con el nuevo mandamás, es decir, para regalarnos, sin que se lo pidamos, acuerdos birriosos, convenios devaluados, concursos de traslados opacos e incomprensibles, retribuciones variables, despidos de PFV’s… un variado repertorio de sustos y sobresaltos. ¿Es ése el cambio cultural al que se refieren?
También CCOO insta al nuevo dire, así lo dicen y tal cual lo reproducimos, a la neutralidad política y la promoción de los mejores profesionales de una Zona, como la V… ¡¡¡NO EXENTA DE RÉMORAS CLIENTELARES!!! -los signos de admiración y las mayúsculas son nuestras-. Esta petición de CC.OO se comenta por sí sola. ¿No sabrán ellos de qué va eso de las rémoras clientelares?
Lo dicho, si aún padeces de empacho por los atracones de las Fiestas, no necesitas sal de frutas o bicarbonato para aliviar la tripita. Te miras el protocolario comunicado de CCOO en posición de firmes -a sus órdenes- ante la nueva Dirección, que sigue siendo la suya, y si no te dan arcadas y arrojas es porque tienes un estómago a prueba de bombas.
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